Bellaco no es

El patriarca Bedoya tilda de “bellacos” a los revocadores e inmediatamente busco en el DRAE las acepciones exactas del término. Hallo allí que es “sagaz”, entre varias. Entonces, ciertamente Bedoya no es un bellaco. Si fuera sagaz, no se hubiera acobardado con Velasco en 1974 y hubiera encabezado las protestas contra la dictadura, lo que le hubiera valido la presidencia en 1980.

Si hubiera sido sagaz no se hubiera prestado a ser socio menor del segundo belaundismo por dos ministerios y terminar comiéndose el descrédito de ese pésimo gobierno.

Si hubiera sido sagaz no hubiera sacado solo 10% en dos elecciones presidenciales seguidas o no hubiera perdido una elección edil casi ganada en 1989.

Si hubiese sido sagaz hubiera apelado como arma política a su meritoria evolución de cholo chalaco humilde a exitoso abogado miraflorino en lugar de darse aires pitucos.

Si este líder del PPC hubiese sido sagaz su partido habría pasado a dos segundas vueltas presidenciales seguidas en lugar de Alan o hubiera ganado una elección edil fácil en lugar de perder con Villarán.

Si hubiese sido sagaz hubiese apoyado la revocatoria para sacar al peor alcalde que Lima ha tenido en su historia.

Si hubiese sido sagaz el PPC habría hecho una corta e intensa campaña en esta elección de regidores, presentándose intensamente como la oposición, y así lograr un resultado mucho mejor –por lo menos un 40%– que este tan mediocre 29%.

Si hubiese sido sagaz no habría permitido que la marca PPC se haya diluido tanto.

Si hubiese sido sagaz el PPC no debería estar en peligro de desaparecer por la valla electoral.

Si hubiese sido sagaz el PPC no hubiera perdido a Amprimo, Ántero, Andrade, Heresi, Kouri, Borea, Allison y mil cuadros más. No efectivamente el Tucán no es bellaco en esa acepción.