– A la ‘megacomisión’ le ha caído una nuclear con el cambio de ‘Brasil’, porque no me vengan a decir que antes era creíble cuando les convenía y ahora no. Esos son los riesgos de apoyar acusaciones tan serias en los dichos de un hampón, que tan fácil se te voltea.
– Con lo que obstaculizó la revocatoria (junto
al inmortal Carlomagno), no me sorprende que Irrivarren, de la Reniec,
ahora salga con que no debe haber elecciones. Es absurda su tesis de que
entren los accesitarios en lugar de nuevos elegidos, porque
precisamente el espíritu de la revocatoria es renovar políticamente el
concejo, no mantener la misma correlación de fuerzas.
– Los homosexuales van a avanzar poco en sus
legítimos derechos mientras que comunistas ardientes como Verónica
Ferrari y Gio Infante intenten liderarlos. Le restan convocatoria a su
campaña al ‘rojearse’ esta con mensajes resentidos y llorones.
– Se cae en la cojudez cuando se arma un
escandalete por la foto de una modelo con una ‘mamacha’. Hasta la
viceministra Patricia Balbuena cayó en la payasada ‘políticamente
correcta’.
– Muy mal esos trogloditas ‘universitarios’
arequipeños al agredir al congresista Mora en lugar de intercambiar
ideas. Refuerzan la impresión de que Arequipa, desde la violenta
explosión irracional de EGASA, no tiene
remedio, que también tienen una roja mentalidad perdida como los
cusqueños (que se alucinan romanos desplazados, les echan la culpa de
todos sus problemas a los demás y siguen atrapados en el siglo XVI con sus obsesiones con los españoles).
– Si los expertos rojos Humberto Campodónico y
Francisco Durand quieren que se dilapide US$3,500 millones en la
cafetera de Talara, que pongan su plata. Es fácil ser generoso con
dinero del contribuyente en planes cojudos.
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