– El crimen en nuestro país ha tocado máximos con el lamentable asesinato del alcaide del penal trujillano. Ese atrevido desafío del hampa al Estado no puede quedar impune porque, ya a la próxima, entonces no dudarán en matar a un ministro, a un congresista crítico o a algún personaje de peso, y esto ya se vuelve una Colombia de los años 80 o un México actual.
– Si fuera chileno, andaría inquieto con ese plan de gobierno tan absurdo (alza de impuestos, cambio de Constitución, AFP
estatal, sindicalismo, etc.) de la favorita Bachelet, un personaje muy
mediocre e inexplicablemente tan popular. Como peruano, me alegro de que
un viejo rival sea tan tonto de elegir tan mal y de perder así fuelle
en nuestra vieja carrera.
– Hoy se presenta Karp en el Congreso. Si me
dan a escoger entre la primera fila de un concierto de Madonna o de esta
declaración, me voy por la segunda. ¡Karp da shows mejores, mezcla de
David Bowie antiguo en la pinta y de Sex Pistols en agresividad!
– Parece que le fue como la mona a la
corriente kirchnerista en los comicios legislativos de ayer en
Argentina. Pero Giacosa debe consolarse porque ganaron en la Antártida. Y
algo serio de salud debe tener Cristina para desaparecerse tantos días.
Pero no hay por qué alegrarse tanto, porque esto significa solo que una
facción del peronismo le está tomando el relevo a otra y todos ellos
son lobos de la misma camada.
– Han lanzado a Gastón Soto Vallenas como
candidato a la Defensoría del Pueblo. Me sumo porque don Gastón tiene
una impecable trayectoria y no está para nada en la órbita caviar. Por
todo eso, no creo que le tiemble el pulso ahora en el CNM en el momento de examinar la irregular actuación del juez San Martín en mi caso.
– Murió ayer Lou Reed y la música se tornó silencio en homenaje. ¡Un gigante!
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