Me carcajeo cuando hablan que la concentración de medios solo tiene que verse en el PJ, como si este fuera celestial y allí no te pudieras topar con un juez que cambia prescripciones, sigue siendo distraídamente apoderado de un banco, presiona políticamente –¡junto con un expremier!– a una jueza para influir en su fallo y consulta con extranjeros cómo puede ser condenatoria una sentencia, amén de haber trabajado él y su hijo en un conocido bufete penalista.
– Mañana el CNM examina el caso del juez San Martín y los e-mails con Alicante, además de estar por votar sobre la reunión San Martín/Jiménez/jueza Rojasi. Los consejeros Talavera (amigo de San Martín) y García Núñez (político de izquierda radical) deben inhibirse en ambos casos. Talavera porque su esposa Martha Mora es la fiscal en el actual juicio a Fujimori. García Núñez también, pues adelantó opinión sobre los e-mails en La Primera y sobre esa reunión en un acta (que consta en el mismo CNM). Otro consejero que debe inhibirse en el caso alicantino es el correcto Máximo Herrera, pues también adelantó opinión al comentar que un caso similar había sido archivado. Y un voto que podría no ser imparcial en el caso de la reunión es el de Soto Vallenas, que anda en pos de la Defensoría del Pueblo y del que se rumora es muy amigo del expremier Jiménez. A seguirle con lupa.
El CNM debería
mañana revisar el último ejemplar del semanario de Hildebrandt, donde en
un reciente e-mail la profesora Mar Carrasco Andrino (U. de Alicante)
allí admite que un becario peruano (¿Juan Carlos ‘el negro’ Sandoval o
Gonzalo del Río?) les consultó, a petición de San Martín, sobre el
juicio a Fujimori. ¡Así se reconoce la validez existencial de los nuevos
e-mails y no se puede ya alegar que son “bambas” o adulterados!
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