Me pongo a tomar unos tragos con una fuente caviar y esta me dice: “Compadre, este brasileño Luis Favre es un genio, nada qué hacer. Le ha dicho a la izquierda que tiene que buscarse un candidato centrista y popular, con características de ‘outsider’ para llegar al poder en 2016 (y, de paso, asegurar al estratégico Perú en la órbita brasileña) dado el desprestigio actual de la clase política.
Claro, se corre el riesgo de que les resulte un Ollanta, que se les tronche como este ‘outsider’ militar al cual apostaron Brasil y la izquierda, pero no queda otra porque no hay nadie carismático en la zurda actual y son conscientes de que solo una coalición les sacaría del marasmo. Favre les ha propuesto a Gastón, quien iría aupado por Acción Popular, partido socialconfuso rosado, de Yonhy Lescano y Mesías, aliado de la izquierda y que estaría dispuesto a un matrimonio con el Frente Amplio de Izquierda de cara al 2016. ¡No sabes cómo se entusiasmó Siomi con la idea y cómo al toque se puso a trabajarla! Es que Gastón sería el caballo de Troya perfecto para que la izquierda peruana asuma totalmente el poder. Además, le gusta lo ‘progre’, lo ‘zurdo chic’ y lo ecológico. El cálculo de Favre es que Gastón sacaría un 20% en la primera vuelta, quedando segundo tras el 25% de voto duro de Keiko, llevándose la mayoría de los votos de Toledo, Castañeda y PPK del 2011, además de barrer en Lima. Por eso, Alan tiembla ante esta candidatura que lo aniquilaría. Y de allí se repetiría la gran alianza antifujimorista del 2011 contra Keiko, y Gastón ganaría tranquilo en la segunda vuelta. Y, de allí, Siomi premier y el embajador brasileño gobernando. Por eso AAR y Nelson Manrique festejaban esto ayer en sus columnas”.
PD: Todo parecido de este cuento con la realidad es pura coincidencia…
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