miércoles, 25 de diciembre de 2013

Sandinismo=Somocismo


– Con 3 periodos presidenciales (1985-1990, 2006-2011 y 2011-2016), el sandinista Daniel Ortega pronto tendrá 15 años en el poder, con la posibilidad de varios más al su lacayo Congreso haber aprobado ahorita la reelección indefinida (y en 2011 Ortega se hizo reelegir violando la ley).

Si tenemos en cuenta que el dictador Anastasio Somoza (padre) gobernó 16 años y su hijo ‘Tachito’ Somoza 10 años, Ortega ya prácticamente igualó al viejo tirano en el poder y el izquierdista sandinismo terminó degenerando, para acabar ser idéntico a su odiado somocismo de derechas. Me imagino que aquellos idealistas (como The Clash, que hasta un álbum titularon así) que de verdad creyeron en el sandinismo revolucionario a mediados de los 70 deben estar con arcadas al contemplar en lo que acabó este proyecto romántico y utópico, en un corruptísimo (su ola de robos fue conocida como “La Piñata”) y entornillado Frente Sandinista que poco ya tiene que envidiarle al podrido Partido Liberal Nacionalista de la dinastía Somoza. ¿Y aquí han escuchado a algún rojicaviar peruano criticar a Ortega por entornillarse cual Fujimori? Cuando lo hace la derecha es malo, cuando lo hace la izquierda no.

– Todo indica por el momento –a juzgar por ese sólido ‘voto duro’, que oscila entre el 25% y 30%, según todas las encuestas– que la pregunta para las elecciones de 2016 es con quién pasa Keiko a la segunda vuelta. ¿Un político tradicional (Alan, PPK)? ¿O un outsider, ‘normal’ (tipo Gastón), resentido social (tipo Gregorio Santos o un rojo de esos) o folclórico (el papá de Ciro, Gisella, Tilsa, etc…)? Porque aquí puede ganar hasta el Pato Donald mientras el voto no sea voluntario y se obligue al ‘electarado’ a sufragar. Si, según IPSOS-Apoyo ayer, existe aún un 19% de lesionados cerebrales que apoya la gestión de Villarán .

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